Entendiendo las Diferencias entre COVID-19, Gripe y Resfriado

¿Qué es un resfriado?

El resfriado es una enfermedad vírica que habitualmente nos hará tener tos, mocos, dolor de garganta y de cabeza y febrícula (menos de 38ºC). Suele empezar por la nariz y la garganta, y puede bajar a los bronquios. Es una afección leve que tarda pocos días en curarse, pero puede agravar otras enfermedades como el asma o el enfisema pulmonar.

Hay más de 200 virus que pueden causar un resfriado. Es por eso que hay una vacuna por la gripe y no hay ninguna para los resfriados.

¿Qué es la gripe?

La gripe también es una enfermedad vírica, que se contagia fácilmente. La gripe comienza de forma brusca y provoca fiebre elevada (39-40ºC), tos, dolor de cabeza y malestar general. La gripe puede durar entre una y dos semanas, pudiendo tomar medicamentos para aliviar los síntomas (analgésicos y medicamentos por la fiebre).

Con gente con otras enfermedades puede provocar complicaciones, por lo que se recomienda la vacunación para evitar infectarse.

Este año, por primera vez, también se recomienda a niños de 6 a 59 meses porque son el grupo de edad que más sufre gripe y pueden presentar complicaciones.

¿Qué es la COVID-19?

Aunque en mayo de 2023 se dio la crisis sanitaria por finalizada, el virus del SARS- CoV-2 sigue circulando. La mayoría de personas desarrollan una enfermedad respiratoria leve con fiebre superior a los 37,5ºC, dolor de cabeza y cuello, tos seca, dolor generalizado en las articulaciones y/o musculatura, resfriado nasal, vómitos y/o diarreas. Habitualmente los síntomas duran entre 2 y 3 semanas. Si hay dificultad respiratoria repentina o fiebre mantenida durante días, contacte con su profesional sanitario de referencia en el CAP o puede llamar al 061 Salut Respon.

Ante los síntomas leves se trata como la gripe o el resfriado, pudiendo tomar medicamentos por los síntomas. La vacunación contra la COVID-19 es la medida más efectiva para reducir los riesgos de enfermar y evitar complicaciones.

Por los síntomas

Congestión nasal:
Sprays nasales con oximetazolina o similares. También sprays naturales con agua hipertónica y esencia de eucalipto.

Gripe y resfriado:
Combinaciones de analgésicos y medicamentos para detener el goteo nasal. Aceites esenciales de canela de ceilán, eucalipto y menta piperita (fitoterapia).

Dolor de garganta:
Antiinflamatorios por vía oral o en forma de caramelos. También hay caramelos de aceites esenciales de ravitsara y clavo (fitoterapia).

Tos seca:
Jarabes de dextrometorfano, cloperastina. Jarabes de Malva y drósera o hierba de la gota (fitoterapia).

Tos productiva:
Jarabes de ambroxol, acetilcisteina. Jarabe Hiedra (fitoterapia).

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