I LOVE Barceloneta By Casey Giesler . Captain Maritime

EB-De tu Florida natal a La Barceloneta y recorriendo todo el mundo.

CG- Los últimos veinticinco años de mi vida los he centrado en el mar , trabajando a bordo de yates de motor, así como de varias embarcaciones comerciales, veleros tradicionales y yates de vela de alto rendimiento. Un vagabundo pagado o un vagabundo profesional. Como miembro de la tripulación, podemos pasar tiempo a algunos de los sitios más maravillosos, tanto conocidos como completamente desconocidos. Los yates, como se nos conoce coloquialmente, tienden a vivir en áreas ricas en cultura náutico a: Antíbol Mónaco , Palma, Fort Lauderdale . Ninguna de estas , ni muchas otras áreas , me parecían correctas. Al final visité Barcelona regularmente con el yate para trabajar en MB92 o parar en el Port Vell. La ciudad me atrapó de inmediato y sentí como el lugar para estar allí. Una ciudad vibrante e histórica con un fuerte vínculo con la historia marítima. Como tripulación de un yate tendemos a frecuentar los restaurantes, bares y atracciones que se encuentran muy cerca del yate, que en este caso es, por supuesto , La Barceloneta. Con el tiempo decidí que ésta era un área donde quería establecerme.

EB -Tu con La Barceloneta, ¿amor a primera vista?

CG- Ha! Ha! No puedo decir que todos los aspectos de L en Barceloneta me permitieran sentir amor a primera vista. Al principio, puede resultar algo abrumador con las multitudes de turistas que rodean el barrio . Cuando me abrí camino entre la multitud hacia el corazón del vecindario, me enamoré de como de único es. En cierto modo, se siente como un pequeño pueblo dentro de la ciudad más grande. Un sentimiento muy local en muchos de los negocios, plazas, bares y cafés. Y me encanta ese aspecto. En otras partes de la ciudad uno puede sentirse como miembro más de la multitud. En La Barceloneta todo el mundo parece tener una historia y de pertenecer.

EB- Sabes que La Barceloneta no era tierra, era mar.

CG- La expansión de Barcelona es una fascinación para mí. Desde la expansión más allá de las antiguas murallas de la ciudad hasta el desarrollo de lo que eran unas pocas rocas en una gran península que ahora es La Barceloneta, los puertos más la mayor parte del paseo marítimo de la ciudad. Si pasas demasiado tiempo en La Barceloneta, es difícil imaginar que Barcelona sea en realidad una ciudad construida entre colinas.

EB- Tu día ideal en el barrio .

CG- Un baño breve para empezar el día, especialmente en invierno cuando el agua es mucho más tonificante. Un café en el Baluard Café. Más tarde, un rato en la playa. Una cerveza y aperitivo en la Bodega Fermín y una velada comiendo en uno de los excelentes restaurantes.

EB- Explica a tus amigos con una frase en la que vives.

CG- Me mudé recientemente al Eixample, pero extrañé vivir en la Plaza del Mar cada día!

EB- 3 cosas mejorables.

CG – 1. Limpieza de la playa y del ’agua. / 2. Sentido de delincuencia menor. / 3. Vendedores en la playa.

EB- 3 cosas inmejorables .

CG- 1. La conexión inmediata con el mar. / 2. Variedad de pequeños restaurantes, bares, cafeterías, etc. de alta calidad en un área tan pequeña. / 3. El vecindario de L en Barceloneta.

EB- Nadie es foráneo en el barrio , porque todos descendemos de foráneos . ¿Lo notas?

CG- Sí, debe ser por eso que es una comunidad tan tolerante. Todo el mundo tiene una historia y todavía siente que pertenece.

EB- ¿Crees que valoramos lo que tenemos aquí ? Muchas veces los españoles nos sentimos menos , pero creo que es porque no viajamos lo suficiente para poder apreciar lo que tenemos aquí. ¿ Qué opinas ?

CG- Yo diría que el corazón de La Barceloneta pasa desapercibido fácilmente, hecho que también le permite conservar cierto encanto. Mucha gente, tanto locales como turistas, se aventuran a la playa y después regresan a la ciudad sin explorar completamente lo que ofrece el barrio. Estoy seguro de que los de L en Barceloneta aprecian lo que tienen.

EB- ¿ Dónde me llevarías a comer una buena paella?

CG- No iremos a por una paella, pero con mucho gusto podemos quedar para una Fideuà en Can Ros !

…. ¡Pues vamos !

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