Primer barrio fuera murallas

El año 1749, el Capitán General Marcas de la Mina, decidirá la construcción de un nuevo barrio, en las afueras de las murallas de Barcelona, sobre una pequeña península que se había creado hasta la isla de Maians (islote de arena situado a poca distancia), a consecuencia de los sedimentos que dejaron el río Besos y la Reguera Condal y que el Puerto Viejo hizo de pared. En esta zona, se habían instalado una serie de barracas y almacenes de pescadores sin ningún control ni orden.

El Marqués de la Mina pedirá la colaboración del ingeniero en ninguno Juan Martín Cermeño, que creó un proyecto nuevo, que no solo resolvió la desorganización de las barracas, sino que también resolvió a la falta de viviendas de la ciudad, la ampliación del puerto y un control militar en la población asentada. No olvidamos que la Barceloneta siempre a estado bajo la jurisdicción militar y no será hasta el 1872 que pasará en manos del Ayuntamiento, una vez derruida la Ciutadella.

El nuevo barrio fue construido con estilo Barroco, con calles rectilíneas, perpendiculares y paralelos en el mar. Todo mesurado igual con anchura. El primero que se hizo fue derrocar las barracas existentes, y nivelar el terreno que había fuera muralla. Administradores de rentas como Domingo Fernández del Monte y Domingo Álvarez de Secada, dan ejemplo dejando demoler sus almacenes de vino donde venían por cuenta de la Real Hacienda.