El protagonismo de la mujer en la Barceloneta viene de siempre. De cuando aún se desconocían términos como feminismo, empoderamiento o igualdad de género. En este barrio la mujer siempre ha sido emprendedora o cabeza de familia, creando y tirando “palante” su negocio y su casa.
El hogar, mientras sus maridos estaban en la mar, en la fábrica o en el puerto; y su negocio porque muchas de ellas eran las que estaban al frente del restaurante o merendero, de la tienda, de la parada del mercat o del negocio familiar.
La Barceloneta ha sido, en muchos sentidos, un matriarcado. Sin postureos, sin reivindicaciones y a menudo sin ser conscientes de ello.
Palmira, Pilar, Lola, Nitus, Carmen, Leo, Emilia, Antonia, y tantas tantísimas otras que es imposible enumerar a todas.
En este número hemos querido homenajear a esas mujeres y hemos pensado que esta nueva generación de estibadoras (un trabajo tradicionalmente masculino) era una digna manera de hacerlo.
Por ellas. Gracias a ellas.