Orígenes
En los años 40, en Ramón Ballarín, fundador de Can Ramonet, empezó trabajando en la bodega El Ocho (la pequeña bodega de la calle Atlántida 8). Se inició en el sector vendiendo y repartiendo vinos y licores a los restaurantes y los merenderos del barrio.
Ya en 1956, Ramón, junto a su esposa Ramona deciden gestionar por sí mismos una taberna popular frecuentada principalmente por pescadores, que había sido almacén y bodega de vinos desde 1763. Era, por tanto, la taberna más antigua de la Barceloneta. En esta casa construida en 1753 en la calle Maquinista 17 es donde comienza hace siete décadas la historia de Can Ramonet.
Al principio sólo servían vinos para llevar, pero rápidamente, cogió empuje el tomar vasos de vino encima de las botas almacenadas y, al poco, ir acompañados por aperitivos cómo aceitunas y anchoas que la Ramona limpiaba sin parar. Muy pronto, cogieron fama los platillos del día que Ramón anunciaba con poesía y pareados en sus pizarras en la calle.
No podemos olvidarnos de mencionar al Tete, Sinesio , que en esta época empezó como encargado y así fue durante 50 años. Amigo personal de la familia, ayudó a dar empuje a un negocio que tenía el objetivo de satisfacer a la clientela permanentemente.
De taberna a restaurante
Finalmente, la pequeña taberna se transformó sin querer en restaurante. Esqueixada de bacalao, pescado fresco de la playa, caracoles guisados, entre otros platos, se servían entre la clientela vecina del barrio y los visitantes que se acercaban a la Barceloneta.
Con los años, y con la evolución lógica del paso del tiempo, el restaurante se ha convertido en todo un referente gastronómico, en el que se ha sabido conservar las recetas tradicionales de toda la vida y, al mismo tiempo, evolucionar con nuevas propuestas.
Tres generaciones
A los fundadores Ramon Ballarín y Ramona Vall-llaura les siguió su hija Magda y su marido David, que supieron mantener la esencia que sus padres representaron. El relevo de Magda y David, y tercera generación, son los actuales responsables, su hijo Marc, Ana y el Jesús. Sabia nueva que tiene muy presente cuáles son los principios que han hecho de este negocio familiar todo un referente y saben que la Barceloneta es el barrio que le ha dado la oportunidad durante décadas de mostrar al mundo su trabajo.
Equilibrio. Ésta podría ser la palabra a utilizar para describir el secreto del éxito de Can Ramonet. Saben combinar las recetas icónicas de toda la vida de cocina marinera, con toques e innovadores ingredientes. Cocina catalana y marinera tradicional y también evolucionada. Saber combinar la calidad de un producto de proximidad con la calidez de una atención al cliente, también muy cercana y humilde.
Ahora ya son el Grupo Ramonet. Gracias al buen trabajo de tantos años han podido abrir más establecimientos, todos en la Barceloneta: El Nou Ramonet (2003), un restaurante que sigue la estela de Can Ramonet, más grande y cómodo para satisfacer todas las necesidades de sus clientes; La Vinoteca (2008), una tienda de vinos en el barrio que vuelve a los orígenes; y, La Fresca (2014), un pequeña esquina donde tomar tapas o hamburguesas de modo distendido.
Historia y sabor
En Can Ramonet los sabores del Mediterráneo se mezclan con la historia. Tiene la base gastronómica de toda la vida. Las sartenes más clásicas cómo las de marisco o mixta, dejan paso también a las de rosbeef o rabo de toro. Siempre hechas con arroz del Del ta, eso sí. Anchoas del Cantábrico limpiadas a mano, pescado fresco de lonja (traido por pescadores de la Barceloneta) hecho al horno o a la Donosti , gamba roja, ibéricos Joselito y carnes de Girona, entre otros platos para chuparse los dedos. Cada bocado es un homenaje a la cocina tradicional catalana de proximidad.
Grupo Ramonet
Partiendo del restaurante original, Can Ramonet , la familia ha ido abriendo establecimientos que completan una oferta fiel a sus orígenes y al tiempo más variada.
Nou Can Ramonet
Inaugurado por Magda Ballarín y David Francés en 2003. Pensado inicialmente para satisfacer a los clientes que no encontraban mesa en Can Ramonet , es hoy un local con personalidad propia , especialmente indicado para celebraciones de grupos .
La Fresca
Un local vitalista con comida ágil. Tapas y platillos para el vermut o una comida más informal con carta y también menú. No se pueden olvidar sus desayunos y brunches.
La Vinoteca
Un espacio para los amantes del vino que homenajea los orígenes de Can Ramonet . Especilistas en maridaje con más de 800 vinos .
